Estamos ya en Adviento. En nuestro Colegio el mes de diciembre siempre trae muchos acontecimientos y celebraciones que nos disponen para el gran momento de la Nochebuena. Los queremos aprovechar muy bien, todos y cada uno de ellos, con alegría, con paz, en su pleno sentido. Entonces llegará la Navidad.
El viernes 5 de diciembre, recibimos la visita del Señor Obispo San Nicolás. Este hombre es un ejemplo de vida, de servicio desinteresado. De manera oculta y silenciosa hacía llegar lo necesario a quienes pasaban necesidad.
Él, cada año, viene desde el Cielo a traer los mensajes de allá arriba. Mensajes que expresan que se conoce muy bien a cada niño, a cada clase, que se cree en los talentos las fuerzas positivas que posee cada persona y se valora cada comportamiento de altura.
Los alumnos de Educación Infantil reciben su visita personalmente. La mirada enaltecedora de San Nicolás se guarda en el alma de estos pequeños, es una vivencia de que Dios se alegra con su manera original de ser y con sus obras buenas.
En Primaria y Secundaria, los alumnos de cada clase, al entrar a primera hora, encuentran una carta y unas monedas de chocolate. Es un reflejo del Cielo que toca la tierra. Dios siempre busca instrumentos que les digan a los hombres que su amor les acompaña y que los necesita para construir un mundo mejor.
Quiero compartir con vosotros una de las cartas que escogí al azar entre todas las que recibimos:
5 de Diciembre de 2018
Queridas niñas de 1º de E.S.O.:
Un gran saludo desde el Cielo.
¡Qué orgullo teneros ya en Secundaria! Todos estos años hemos compartido las fechas cercanas a la Navidad, y ahora me hace muy feliz poder veros en vuestra nueva clase, tan mayores, con toda una nueva etapa por delante y con retos que conquistar. ¡Lo vais a hacer tan bien!
En este año que está a punto de terminar habéis vivido muchas cosas juntas, buenas y malas, y siempre habéis salido victoriosas. Se nota que estáis muy cerca de la Virgen María, y que Ella es el modelo que seguís al estudiar, al estar con la gente, al ayudar a los compañeros. ¡Estáis dejando una huella preciosa a vuestro alrededor!
Desde el cielo nos alegra ver vuestra forma de discutir sobre temas profundos, vuestras idas y venidas al cuarto de baño para arreglaros, vuestros alegres recreos con los patines… De todo vuestro Colegio, usáis el aula que está más cerca del Santuario, y además lleváis toda la vida cerca de María, y eso se nota. Se nota en cómo os queréis entre vosotras y en cómo os esforzáis por hacer las cosas cada día un poco mejor.
Oiréis muchas veces que estáis en la edad de la adolescencia y que eso parece malo al principio, por los cambios que se sufren y porque uno crece de golpe en esos años… A mí esa edad ya me pilla muy lejos, pero sí que os puedo recomendar que viváis todo con intensidad y que os cuidéis mucho. Sois unas niñas estupendas y estáis en una etapa preciosa para descubrir vuestra personalidad y sacar lo mejor de vosotras mismas. Esforzaos, para que ninguno de vuestros talentos se quede sin descubrir.
Continuad mejorando el mundo que os rodea; estudiad mucho y cuidad de vuestras familias. Tened confianza en vosotras mismas, que el Buen Dios está siempre con vosotras.
Como bien sabéis, yo me dedicaba a repartir lo mío entre los más desfavorecidos. Os pido que aprendáis siempre cosas nuevas para mejorar la vida de los que os rodean. El mundo os necesita: necesita que cojáis vuestra herencia, todo lo que habéis vivido, y que lo proyectéis al futuro. Continuad creando ese clima de alegría a vuestro alrededor, que en la paz y en la alegría es donde nace el Niño Jesús.
Os dejo chocolates para que tengáis fuerza y alegría en estas fechas cercanas a la Navidad.
Con mucho cariño y mi oración para que Jesús obre el milagro en esta Navidad en cada una de vosotras,
Vuestro San Nicolás
Desde ya os deseo que María, la Inmaculada, camine por vuestro Adviento día a día, hasta que en Navidad regale a su Hijo en el seno de cada Familia.
Hna. María Crevillén
Jefa de Formación